La anterior década fue otra década perdida para la humanidad en la lucha contra el cambio climático y, por lo tanto, contra los combustibles fósiles, que son responsables de la mayoría de los gases de efecto invernadero que expulsa la actividad del ser humano. Porque, a pesar de la expansión de las renovables, la cuota de energía generada con gas natural, petróleo y carbón en el mundo no varió en los últimos diez años. Es una de las conclusiones del informe elaborado por el grupo internacional de análisis REN21 sobre la evolución de las energías renovables en el mundo.