El ser humano lleva 400.000 generaciones habitando este orbe de azul y tierra. Ha soportado semanas en las que parecía que nunca dejaría de llover y meses de un estío infinito. Conoce las consecuencias de la aridez. Los acadios desaparecieron hace 4.000 años, los mayas entre los siglos VIII y IX después de Cristo y los granjeros de las grandes planicies (Kansas, Colorado y Dakota) abandonaron sus pastos en los años treinta del siglo pasado. Todo era polvo e ira. La falta de agua ha acabado con civilizaciones enteras. La sequía cuartea la tierra, como un caminante que atravesara Comala, de Juan Rulfo, y amenaza con convertirse en la próxima pandemia. Y nadie posee una vacuna.